17.10.09

Ajenas

..escribo para que los otros amen lo que es necesario amar; a veces, lo que yo misma amo. Por lo tanto, escribo para ser amada. Escribo para no olvidar lo más importante que hay en el mundo: la amistad y el amor, la sabiduría y el arte.
Es una manera de vivir sin morir, de morir sin morir.

Silvina Ocampo


La esperanza no es la convicción de que las cosas saldrán bien sino la certidumbre de que algo tiene sentido sin importar su resultado final.

Vaclav Havel

23.9.09

la pregunta

Golpeteaban al unísono los saquitos de azúcar, preparando el terreno:

Estoy segura de que Miguel es un chico malo -dispara-.
- malo cómo?
Malo de los mejores -silencio breve-
como un encaje de bruselas con espinas invisibles.
- y cuál es el problema?
Que me encanta.
- y cuál es el problema?
Que si le hago caso a mi sangre voy a terminar siendo un capítulo de su libro.
- y cuál es el problema?
Que no voy a ser el último capítulo.

- de espaldas le adivino la sonrisa, maldito -
Ponete el vestido azul.

15.9.09

memoria emotiva

a veces no le importa
y es cierto
a veces no le importa
y es mentira


me sorprenden las señales, quizás porque ahora las veo todo el tiempo.
encuentro a Krishnamurti suelto dentro de un libro de cocina muy viejo.
hago bailar a personas que no conozco música que no conocen, se divierten y agradecen sin saber que la agradecida soy yo.
sorpresa y agradecimiento vienen siendo excelentes paliativos para la espera.

prendo un sahumerio, seco las carcajeadas lágrimas que volvió a sacarme Descalzos en el Parque después de 20 años, recupero a la nena que soñó con Nueva York gracias a Neil Simon y me voy a dormir.


18.8.09

arquetipos



En esta limpieza profunda de placares que tiene bastante de desapego, mucho de relectura y todo de resignificaciones, se están salvando pocas cosas, pero eso -si me dan ganas de contarlo- será otro post.
Una de las ventajas de hacer diariamente un dossier de prensa durante algunos años fue poder quedarme con suplementos que a nadie le interesaban. Respetuosa de la autoridad esperaba hasta el viernes a la tarde. Desde el escritorio miraba crecer toda la semana la pila de recortes inservibles y, cuando estaban a punto de ser desechados, los rescataba y me los llevaba. Esos días era una cartonera más, un ekeko de letritas.
Ayer, mientras pensaba que faltaba poco para terminar, encontré los arquetipos, recortados y metidos en folios, en un cajón.
Casi pude sentir el olor del primer café de la mañana de los viernes, cuando llegaba Página 12 con el suplemento Las12. Cada semana, desde la contratapa, Sandra Russo se despachaba con la descripción de un especimen masculino argentino: el fóbico, el tímido, el complicado, el mitómano, el estratega, el marido, el dependiente, el casado, el banana, el platónico, el insatisfecho, el salame, el criticón, el que se queda, el yo soy así, el demandante, etc. (ya se dieron una idea).
Parece que fuimos muchxs lxs que reparamos en esa joyita pre-era de los blogs que finalmente se compiló en un libro.
En homenaje a esas mañanas y a la señora Russo les dejo uno de los esperanzados:

El que sabe

Este vale la pena, porque, hay que decirlo, sobre todo después de algunas quejas recibidas por parte de varones irritados por lo que consideran una selección arbitraria y despectiva de arquetipos: algunos tipos son deliciosos. Aunque nos hagan sufrir un poco, porque de eso no se salva nadie: los hombres vienen genéticamente dotados para decir lo menos oportuno en el momento más desaconsejado, para tomar decisiones absurdas alardeando del más común de los sentidos y para olvidar exactamente aquello que una ha juzgado inolvidable. Pero con éste una pasará prueba tras prueba y esquivará obstáculos como pichicho oliendo un caracú. En un mundo poblado por gorditos que se creen rajás y piden las pantuflas, por patovicas unineuronales y por muchachos sensibles que serán adorables pero no paran de hacer glu glu en un vaso de agua, hay algunos que saben.
Qué es lo que saben...es difícil de precisar y ésta es la gracia, porque de lo que se trata en estos casos es de un tipo que provoca golpes de efecto indescifrables, que no les teme a la desmesura ni a los porque si -o sí les teme, pero se la banca- que ocupa su lugar cómodamente sin hacernos sentir que nos han robado ni un centímetro, y que no entra en conflicto con su hombría por pavadas (los pantalones los lleva en el cerebro). El que sabe no es un estereotipo, sino más bien un tipo en estéreo: más que aparecerse con un ramo de liliums, con una caja de bombones forrada en terciopelo o con un anillo de brillantes -esos detalles que fascinan a Silvia Suller-, el que sabe resuelve la cena alegremente mientras nos pide que nos pongamos cómodas -él disfruta más de una mujer que se siente cómoda que de una que le haga la comida, aunque esto no le impida decretar, llegado el caso, que hay que servirlo como él se merece-, puede traernos de regalo una fantasía que nos quite el sueño o que nos lo devuelva, se ocupa de que todo lo previsible parezca inesperado, tiene la suficiente astucia como para hacernos creer que lo complacemos cuando hacemos exactamente lo que teníamos ganas, adivina deseos que ninguna vidente se animaría a leer en la borra de café, disfruta tanto de los ritos -un té de vainilla o un brandy cada noche de lluvia- como de la impiadosa abolición de todos ellos, y tiene el don de vivir el estricto presente sin dejar de proyectar sombras chinescas en el futuro cercano.
El que sabe, lo que sabe, es combinar la más conmovedora caricia hogareña -esa que nos hace sentirlo conocido, familiar y confiable- con esos oscuros sacudones a la mente y al cuerpo que hacen que nos parezca otro. Lo que sabe, en fin, es dejarse encontrar y dejarse perder. Parece simple, pero es un arte.
Las12 3 de septiembre de 1999.

29.7.09

argentina identidad

La acumulación de información, cada vez más atomizada, reducida a dato, es una predicción cumplida de los teóricos. No reemplaza jamás al conocimiento.

Mientras tiro artículos de diarios archivados prolijamente durante años releo inevitablemente: la pista de Anillaco, el derecho a réplica de Massera por televisión, AMIA, Chacho Alvarez, Rodríguez Saa, María Soledad, la conexión con los narcos, cómo usar internet, la caída del muro, las torres, el helicóptero emergiendo de la rosada, fondos reservados, decretos de necesidad y urgencia, privatizaciones, coimas y merca en el senado, Gelman y Galeano repetidos hasta el cansancio en contratapas.
Releo y la desazón me transita, pesada.
Rompo papeles y tiro, con la certeza de no necesitarlos más, con la esperanza de que no me atrape el escepticismo y menos aún el cinismo.
Soy producto de este país difícil de explicar.

1.7.09

de culpas y responsabilidades

El analfabeto político

El peor analfabeto es el analfabeto político.
El no ve, no habla, no participa de los acontecimientos políticos.
El no sabe que el costo de la vida,
el precio del poroto, del pescado, de la harina, del alquiler,
del calzado o del remedio,
dependen de decisiones políticas.
El analfabeto político es tan burro que se enorgullece
e hincha el pecho diciendo que odia la política.
No sabe, el imbécil, que de su ignorancia política
nace la prostituta, el menor abandonado, el asaltante,
y el peor de los bandidos
que es el político corrupto
lacayo de las empresas nacionales y multinacionales.

Bertold Brecht
(1898-1955)

20.6.09

la chancha, los veinte...

...y el negro que te apantalle.
así decían en mis pagos cuando alguien expresaba un deseo exagerado.
rompiendo el círculo de baba afirmo que se puede tener todo, total, a la pregunta ¿qué es todo? cada uno tiene una respuesta diferente.


él era, a la sazón, ex novio de una amiga. me gustaba, le gustaba, no decíamos nada, la típica.
los dos teníamos momentáneos problemas inmobiliarios y andábamos en la búsqueda de soluciones.
descubrimos, cada uno por su cuenta, un camping precioso, con cabañas que se alquilaban por 500 pesos al mes.
había pileta, parrillas, mucho verde, vecinos amables convidando mates eternos anque algún que otro músico que seguro se copaba con la guitarra para el fogón.

terminaba velada de reunión con amigos y el muchacho tomó coraje. en un mismo acto declaró tímidamente su amor y propuso, con un poco de pudor pero sin dudar, una solución temporaria:
podíamos compartir una de esas cabañas por 15 días, después él me cedería la casa de sus viejos, que se iban de vacaciones, para que yo estuviera más cómoda hasta que pudiera volver a mi hogar.

ni siquera en ese momento sospeché. todo era maravilloso.


desperté feliz a las 4 a.m., convencidísima de que era verano, tenía como vecinos a Rodrigo de la Serna y Gael García Bernal, ambos en versión "Diarios de Motocicleta", Ben Harper cantaba por ahí y Mark Ruffalo...era mi novio.

analícese y archívese.


PD: ya que este blog está en una racha "meme" y se viene el apio verde tuiú, se lo dedico a los que saben tanto de los sueños como de mis pesadillas y siguen ahí, como crónica, firmes junto al pueblo!

5.6.09

estoy medicada (again)

Lo dije y lo repito:
me encanta bañarme, amo las cremas vichy, soy eficiente a la hora de camuflarme de moderna/seria/elegante o darkie, si acampo no puedo usar bolsa de dormir porque las cervicales me dejan inmóvil, tengo buenas ideas para artesanías pero nula habilidad manual para realizarlas y no fumo porro. En mi porteñizada cabeza esas son las únicas características que me separan del hippismo absoluto. Ah, y que voy al dentista regularmente.

Ayer, mientras esperaba mi turno para este menester, leía el boletín mensual de la prepaga que anunciaba en un rojo feliz, alborozado:

"La espectacular muestra de colon gigante se instala en el Hospital Alemán"

¿Colón? ¿en junio? no nena, colon, colon. ahh. uuu, hay un colon gigante interactivo!! (?) y prometen entrevistas donde "se evacuarán las dudas". ¿Vos me estás cargando?? Que inoportuna elección de palabras señor!! yo le agradezco que me divierta pero por favor...un diccionario de sinónimos..veinte pesitos..no sea tacaño...

Finalmente entro al consultorio, nos saludamos con la susodicha profesional de la dentadura, parece que vamos a dialogar pero no, esa es la ilusión que ella crea como nadie, su arte.
En cuanto abro la boca para decir algo me enchufa el extractor de saliva, asi se asegura mi silencio por un buen rato y que no le muerda un dedo en defensa propia, de paso.

Ahí nomás empieza su monólogo, entusiasmada:

"Esta silicona es buenísima!"

K: agga

"claro, te acordás que antes se usaba cemento?"

K: iii (tratando de no cerrar mucho la boca en la i y que el torno me haga pelota el paladar dejándome muda de por vida, aunque eso me convierta en la mujer perfecta)

"te hago una derivación a fulana para que vea esa muela de abajo"

K: gheno..(la reptmdr)

"a ver, abrí más, aasii"

K: (no pienses, no pienses, no podés reirte, relajate y no pienses!)

pruebo todas las respiraciones posibles, otra que tantra. miro el techo, está limpito.

"listo, escupí y enjuagate"

K: (auto censura de blog)

Cuando por fin fui libre llegaron las recomendaciones finales: no hables, no comas, no bailes, no te bañes, no vivas y tomate media de estas cada 8 horas.

No sé que cara puse, pero fue hasta la sala de espera y volvió con la Rolling Stone de mayo, en préstamo hasta la semana que viene....

Por ser odontóloga es bastante buena psicóloga.

26.5.09

El lo dijo mejor

Ensayo símbolos
exfolio un par de vidas
se mueren los poetas
inmune?
a nada.



Vives, dices, en el presente;
vive sólo el presente.
Pero yo no quiero el presente, quiero la realidad;
quiero las cosas que existen, no el tiempo que las mide
¿Qué es el presente?
Es algo relativo al pasado y el futuro.
Es una cosa que existe siempre y cuando existan otras cosas.
Yo quiero sólo la realidad, las cosas sin presente.

No quiero incluir el tiempo en mi esquema.
No quiero pensar las cosas como presentes;
quiero pensarlas como cosas.
No quiero separarlas de sí mismas tratándolas de presentes.

Y ni de reales las debería tratar.
No debería tratarlas de nada.

Debería verlas, nada más verlas;
verlas hasta ya no poder pensar en ellas,
verlas sin tiempo ni espacio,
ver pudiendo prescindir de todo menos de lo que se ve.
Esta es la ciencia de ver, que no es ninguna.


Bienvenidos a la metafísica en Pessoa/Caeiro.

27.4.09

One

(un pensamiento por día, más es vicio)



a la gotita que cae de la canilla
le importa nada cuánto te costó la grifería nueva.
es democrática.

11.4.09

chica rutera

jala una raya en el asiento de adelante. se da vuelta y ofrece, declino.
nada importa demasiado hoy, ni sus ojos resbalando por mi cuello hasta el escote de esa remera imposible.

mientras intenta impresionarme hablando de Berlín miro el último mensaje del celular. el fastidio se me nota. lo apago.
intrigada, de reojo, pregunta.
fulmino con la mirada su arrogante tres cuartos perfil lleno de pestañas.
tan moderna, famosa, infiel, snob.

- los fans son una mierda, sentencio.

dos pares de ojos mudos esperan definiciones en el espejo retrovisor.

avanza la ruta.
la música tan fuerte, tan fuerte, crea silencio.
crea noche.
crea acuerdos.
crea mientras.
ya no quiero llegar. ni volver.
quiero más mientras.
más de cada uno intoxicado en sus propios pensamientos.

17.3.09

la última (ex)cena

(esos lugares comunes donde nos gustaría no caer jamás a menos que seamos Julia Roberts y cobremos un platal)

¿cuántas veces sintieron que estaban viviendo un reality o una mala película y después vieron lo mismo en una pantalla?

él: porqué no venís conmigo?
ella: porque no, no va a funcionar
él: cómo podés saberlo?

ella camina, alejándose.
no quiere decir más nada pero la historia merece una explicación.

se da vuelta:

"porque sé que un día, quizás mañana, o pasado, o dentro de un mes, me vas a abrazar y voy a empezar a llorar. voy a llorar tanto que se va a inundar la habitación y te vas a ahogar."

él: voy a aprender a nadar, dejame que aprenda a nadar.



cuando se acuerda todavía busca disimuladamente la cámara oculta.

4.3.09

sincericidio


¿qué hará marta?

gracias emma por este aporte.







17.2.09

rehén

Tenía cosas bien bonitas para contar. Cielos que ví, un río que nadé, silencios que necesitaba, algún breve estudio stout sociológico, anotaciones en hojas arrancadas de cuaderno, el hermoso jardín de M. estallando en perfumes diez minutos antes del amanecer, siestas con lluvia, instrucciones para alimentar mosquitos (estar vivo, básicamente), qué hacer cuando entran sapos, el amor irremediable por Lázaro Ramos, un par de graciosas frases multiuso que los amigos me van a escuchar repetir todo el año y así.
pero no.
no pude escapar a la persecución.
volví y Jo (gracias!) se acordó de dejar en casa un libro que me recomendaron el año pasado. como es prestado lo puse en la cima de la pila.
lo empiezo, el autor está hablando de la peste, no sé muy bien adónde quiere ir pero es interesante. de repente noto que mis ojos saltan automáticamente a las palabras esdrújulas de toda la página. vuelvo al principio. lo mismo. no puedo seguir. me da risa. prendo la pc y escribo, sin orden, sin repetir y sin soplar, sin editar.
si quieren jugar agreguen las que quieran (es interminable), yo sólo quiero que con este acto liberador me dejen leer!


con característico espíritu mórbido
una metafísica telefónica
de éxito humorístico
y mayúsculo pánico
la excéntrica psíquica
es melancólico estímulo
del fenómeno clínico.
un ejército estúpido
con anoréxico espíritu
y magnética cólera
de estómago frenético
de vesícula enfática
es púrpura molécula escénica.
abandónica métrica
fatídica matemática
de ánima centrífuga
y música famélica,
la fétida crítica
en explícita pérdida
de orgásmico síntoma
es catártica lúcida
intrépida alérgica
ácida lírica
en errática búsqueda
de prístina sílaba
con tónica hipnótica.
la pálida farándula vernácula
cromática indómita
es insólita cómplice
de psicodélicos límites
e inútiles círculos.


lápida poética
(evidente)

18.1.09

real

este medio pide palabras.
tengo.
puedo darlas.
impunes, definitivas, calientes, poéticas, graciosas, indecisas, oníricas, de catálogo, analíticas.
suelto las esdrújulas y regalo una canción.
comparto.
alguien dice
"gracias, me acomodó el alma".
alguien entendió la diferencia.

gracias.